El CTC nació en 1987 constituyéndose en el primer Centro de Terapia Cognitiva en la Argentina. Fue fundado por la Lic. Sara Baringoltz, quien convocó a un grupo de reconocidos profesionales y docentes universitarios provenientes de distintas líneas teóricas. El espíritu de respeto por la diversidad y búsqueda de integración sigue vigente hoy en día. Los distintos modelos cognitivos encuentran reconocimiento en nuestra institución.
Cumplimos 37 años de trayectoria en la enseñanza profesional de posgrado. Nuestro objetivo es brindar la formación más actualizada y amplia posible, al mismo tiempo que proveer herramientas terapéuticas que enriquezcan al profesional.
Las figuras internacionales más destacadas del campo han sido invitadas por la institución a través de los años y los miembros del CTC han participado constantemente en Congresos Internacionales, entrenamientos en el exterior y actividades científicas nacionales.
Durante estos años, la Institución, a través de sus miembros, ha producido numerosos trabajos científicos, publicando además tres libros: “Integración de aportes Cognitivos a la Psicoterapia” compilado por Sara Baringoltz (1996),“Terapia Cognitiva: del dicho al hecho”(2007) y “Puentes en Terapia Cognitiva. Problemas y Alternartivas” (2012) compilados por Sara Baringoltz y Ricardo Levy.
Los objetivos del centro son: la difusión, desarrollo, enseñanza e investigación en esta línea de psicoterapia.
El CTC no es un centro asistencial sino de formación de posgrado. Los integrantes del CTC brindan asistencia psicológica en sus respectivos consultorios en forma privada.
Las actividades docentes se desarrollan durante todo el año, ocupando un lugar destacado el Posgrado en Terapia Cognitiva, que dura dos años y tiene un especial reconocimiento nacional e internacional. Es de destacar que el nuevo plan de posgrado implementado desde 2007 reúne los requisitos de carga horaria, teórica, de entrenamiento y de supervisión requeridos por la Asociación Argentina de Terapia Cognitiva para la certificación que brinda a sus miembros como Terapeuta Cognitivo.
La institución desarrolla, además, cursos sobre temáticas distintas en:
– Nuestra sede en capital
– CTC virtual
Cabe destacar que nuestros docentes acreditan un currículum de amplia conceptualización teórica y experiencia clínica en la temática que desarrollan.
Por último, queremos aclarar que enfatizamos la importancia de:
– La síntesis personal del profesional que formamos.
– Y el reconocimiento de cada paciente como ser humano original que necesita la mejor ayuda posible.
“Lo que perturba el espíritu no son los hechos,
sino el juicio que hacemos de los mismos”
Epicteto
El campo de los enfoques cognitivos en psicoterapia es muy heterogéneo y está en constante expansión, abarcando desde los programas de la Terapia Cognitiva estándar hasta los aportes más constructivistas. El interés de los profesionales en los últimos años en la Terapia Cognitiva se basa en: su espíritu interdisciplinario e integrador, los resultados clínicos avalados por la investigación, y desarrollos teóricos enriquecidos por la diversidad y complejidad.
El modelo cognitivo entiende que la habilidad de una persona para procesar información y formar representaciones mentales de uno mismo y el medio en que se inserta son cruciales para lograr una adecuada calidad de vida.
El planteo teórico sostiene que los procesos cognitivos y su relación con lo emocional son fundamentales en la perpetuación de la patología. Por tal razón todo cambio en el sistema cognitivo se trasuntará en sucesivos cambios sintomáticos y conductuales.
La Terapia Cognitiva surge como una aproximación caracterizada por sesiones estructuradas, con límite de tiempo, enfocada a la resolución de problemas y orientada a metas. Con el tiempo aparecen otros aportes que enfatizan la necesidad en muchos casos, de extender los tratamientos, dadas ciertas patologías o necesidades particulares, poniendo el acento en lo especifico y diferente de cada paciente en el marco de una relación terapéutica jerarquizada.
Para lograr los cambios deseados, la Terapia Cognitiva plantea la importancia de: objetivos acordados, estrategia y técnicas para alcanzarlos. Terapeuta y paciente participan activamente como equipo de trabajo pero con roles distintos. Es habitual que el paciente tenga “tareas” entre una sesión y otra, como parte del marco del trabajo psicoterapéutico.
Los pacientes al participar activamente en estos procesos desarrollan herramientas que permiten una reestructuración cognitiva más duradera y estable que se traduce en una ampliación de las respuestas emocionales, conductuales y cognitivas frente a distintas situaciones.